La protección de una presunta delincuencia

16 02 2013

Managua, Nicaragua,

16 de febrero de 2013

 

Ingeniero

René Núñez Téllez

Presidente

Asamblea Nacional de Nicaragua

Su Despacho

 

Licenciada

Alba Azucena Palacios Benavides,

Primera Secretaria

Junta Directiva de la Asamblea Nacional

Su Despacho

 

Honorables Señor Presidente de la Asamblea Nacional, Ing. René Núñez Téllez, y Señora Primera Secretaria de la Junta Directiva de la Asamblea Nacional, Lic. Alba Palacios Benavides:

El 30 de enero de 2013 les escribí y entregué en sus despachos respectivos una carta en la que les reiteré el cumplimiento de la Junta Directiva de la Asamblea Nacional en cuanto al procedimiento para analizar dos mandatos judiciales que piden la desaforación del diputado Eduardo Montealegre Rivas, ya puestas en la Agenda del Poder Legislativo pero pendiente de que se incluyan en el Orden del Día. Hoy hago lo mismo.

Siempre me he esforzado públicamente para que nadie politice mi querella imputada al diputado Eduardo Montealegre por haber escrito en el diario La Prensa injurias y calumnias muy graves contra mi persona –al tildarme como defraudador del Estado de Nicaragua- y publicadas el 31 de julio de 2008, a las cuales agregó otras más escritas en una carta que hizo circular desde la casa de su movimiento político el 2 de febrero de 2011.

La reacción del diputado Eduardo Montealegre para esclarecer su presunto delito se reduce a cobijarse con la inmunidad que le confiere su cargo de servidor público para evadir la Justicia de nuestro país, envalentonado junto con los representantes de las corrientes liberales y sus aliados que integraron la bancada de mayoría en la penúltima legislatura con la politización de mi querella en forma pública y desvergonzada desde el 6 de octubre de 2008.

Hoy tengo la confianza que la nueva bancada mayoritaria de la Asamblea Nacional no vuelva a repetir la reprochable politización de mi querella y haga respetar mi derecho humano de tener acceso a la justicia ante el abuso de la inmunidad que hace gala el diputado querellado. Sin embargo, las ocho cartas que les he escrito incluyendo ésta, sin tener aún una respuesta positiva o negativa de su parte, me conducen a preguntarme por qué los diputados y las diputadas se empecinan en proteger a una persona que prefirió cargar con su presunta delincuencia y desprestigiar al Poder Legislativo, en vez de reparar su error y revertir el deterioro de su imagen ante nuestra nación.

Me siento obligado a informarles que continúo y continuaré persistiendo en mi solicitud que incorporen en el Orden de Día de la Asamblea Nacional las dos solicitudes judiciales para que se inicie el proceso de desaforación del diputado Eduardo Montealegre. No me cansaré de hacerlo, con más razón por los invaluables daños morales y los continuos perjuicios económicos que el diputado querellado ha cometido no sólo a mi persona sino también a los miembros de mi familia.

Agradeciendo su atención a esta carta, siempre les reitero las más distinguidas muestras de consideración y aprecio personales.

Atentamente,

Néstor Avendaño Castellón

Economista

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17 02 2013
ABEL REYES TELLEZ

LA CORRUPCION POLITICA JUDICIAL ES UN CANCER .QUE AFECTA
EL BIEN COMUN.

Cuando una persona acepta un cargo político o gana las elecciones a una
oficina, él o ella debe tomar un juramento de defender la confianza
pública. Aunque esto puede s
onar noble en el papel, el cumplimiento de
este juramento puede resultar problemática. Muy pocos candidatos
políticos éxito llegar a la oficina sin hacer unas
cuantas promesas en
el camino. Muchas de estas promesas de campaña son inofensivas, como el
patrocinio de un proyecto de ley o solicitar más fondos para las
escuelas. Otras promesas, sin embargo, puede acercarse a cruzar una
línea ética, como la contratación de familiares o adjudicar contratos
públicos a los contribuyentes influyentes.

El RAE define corrupción de la siguiente manera: “En las
organizaciones, especialmente en las públicas, práctica consistente en
la utilización de las funciones y medios de aquellas en provecho,
económico o de otra índole, de sus gestores”. Pero como lo dice, no sólo
en las organizaciones públicas, existe en todo tipo de organizaciones,
en dónde los prestadores de servicios se aprovechan de las facultades
que tienen para sacar provecho de tipo económico a las personas.
Sin
embargo mucho se ha intentado hacer para combatir este mal que
desquebraja la sociedad de una manera voráz, dando resultados poco
notorios.

En el sentido moderno del término corrupción, política es un cáncer en
la integridad de un organismo gubernamental. Muy pocos funcionarios
públicos comienzan sus carreras con la intención de convertirse en
corruptos, pero algunos sucumben a una forma siniestra de la presión de
grupo en el tiempo. Al ser colocado en una posición de poder político
significativo puede ser abrumadora, y la tentación de doblar o romper
las reglas de una “percepción de un bien mayor” está siempre presente.

La corrupción también ha sido definida como: “comportamiento político
desviado” (falta de ética política); “conducta política contraria a las
normas jurídicas” (falta de ética jurídica y política); y “usurpación
privada de lo que corresponde al dominio público”. Cabe destacar que el
interés personal no es un elemento que necesariamente debe incluirse en
una definición, pues los actos de corrupción no siempre benefician
únicamente intereses particulares.

La corrupción puede
beneficiar a familiares, amigos o incluso a una organización, a una
causa o movimiento social, político o cultural. Debido a lo anterior,
algunos autores han diferenciado la corrupción egoísta de la solidaria.
Para efectos de esta disertación, la corrupción se define como un acto
racional ilegal, ilegitimo y no ético por parte de servidores públicos,
en perjuicio del interés común de la sociedad y del gobierno, y en
beneficio de un interés egoísta o solidario de quien lo promueve olo
solapa directa e indirectamente.

En
un sentido clásico del pensamiento político, la corrupción era el abuso
autoritario del poder,
hasta llegar incluso a su ejercicio tiránico. Tal concepción se expresa en
la tan citada frase de Lord Acton según la cual el poder
corrompe y el poder
absoluto corrompe absolutamente. En la actualidad tal sentido sigue, como se
verá, estando confusamente presente en el discurso político aunque predomina
como referente uno de los tipos de abuso del poder,
aquel que consiste en el enriquecimiento ilegal o ilegítimo de los políticos
o, en general, de las autoridades (corrupción personal) o el favorecimiento
ilegal o ilegítimo a las causas u organizaciones a las que están integrados
aunque no se beneficien personalmente (corrupción oficial), gracias a los
cargos que desempeñan o sus conexiones con quienes los tienen. Están en
juego, así, conceptos de manejo deshonesto de recursos públicos o recursos
en torno a una gestión pública; deshonesto en particular en un sentido
individual, porque generalmente el público es escéptico de que los manejos
calificados de corruptos no conduzcan en algunos casos a una apropiación
indebida de esos recursos1;
en torno a una gestión pública quiere decir que abarca conductas no sólo de
funcionarios públicos sino también aquellas dirigidas hacia actividades del
estado. Este punto de vista, exigiría descartar del concepto la corrupción
que se desenvuelve sólo en el ámbito de empresas o actores privados en
general, sin embargo el uso común del término corrupción suele confundir
ambos niveles.
La
relación entre corrupción y política
es mucho más profunda de lo que quisiéramos y los políticos estarían
dispuestos a admitir. En primer lugar, no hay que perder de vista que la
corrupción no sólo es una acción más o menos consagrada como delictiva
sino también un importante medio de influencia política
La corrupción es un problema que afecta gravemente la legitimidad de la
democracia, distorsiona el sistema económico y constituye un factor de
desintegración social.
La lucha contra la corrupción es tal vez uno de los campos en los cuales
la acción colectiva de los Estados es no sólo útil y conveniente, sino
absolutamente necesaria.

La corrupción es un fenómeno social que ataca a cualquier rubro y a
cualquier clase social, se presenta por la intención de enriquecerse a
costa de las demás personas.

Los países de todo el mundo ven a la corrupción como un problema social
muy grande, hacen cumbres, organizan programas, etc. todo esto con el
fin de arrancar de una vez con este problema.
corrupción política es el mal uso público (gubernamental) del poder para conseguir una ventaja ilegítima, generalmente secreta y privada. El término opuesto a corrupción política es transparencia. Por esta razón se puede hablar del nivel de corrupción o transparencia de un Estado o Nación, la cual se ejerce por discrepancia. la corrupción como “el mal uso o el abuso del poder público para
beneficio personal y privado”, entendiendo que este fenómeno no se
limita a los funcionarios públicos.
También se define como el “conjunto de actitudes y actividades mediante
las cuales una persona transgrede compromisos adquiridos consigo mismo,
utilizando los privilegios otorgados, esos acuerdos tomados, con el
objetivo de obtener un beneficio ajeno al bien común”.

El concepto de corrupción difiere dependiendo del país o la
jurisdicción. Lo cierto es que algunas prácticas políticas pueden ser
legales en un lugar e ilegales en otros. En algunos países, la policía y los fiscales
deben mantener la discreción sobre a quien arrestan y acusan, y la
línea entre discreción y corrupción puede ser difícil de dibujar. En
países con fuertes intereses de grupos políticos, las prácticas de
corrupción se dan con más facilidad.

Las formas de corrupción varían de uno a otro estado de acuerdo con las leyes constitucionales que los organizan.

El
trafico de influencias, el soborno, la extorsión, la malversación y
desvió de recursos, la prevaricación, la cooptación, el nepotismo y la
impunidad son las formas de corrupción más usuales en la administración
pública, por las cuales, las oportunidades de desarrollo se concentran
entre las personas que participan del clientelismo y la politiquería,
extendiéndose de esta manera el fenómeno de la corrupción al pueblo
colombiano, infundiendo en la nación, la necesidad de hacerse cómplice
de la corrupción política para poder tener acceso a oportunidades de
empleabilidad.

Las consecuencias de la corrupción política para
una sociedad son enormes, facilitando a menudo otros tipos de hechos
criminales,
En
contrapartida, una sociedad descompuesta como la nuestra genera
igualmente la proliferación de bandas delincuenciales y guerrillas altiempo que se introduce un problema adicional que es el trafico de armas
y el financiamiento de los grupos beligerantes de extrema izquierda y
extrema derecha con el trafico de drogas, generándose un fenómeno
adicional, como es, el grave problema de salud publica derivado del
consumo de sustancias ilícitas que alcanza cada vez a un mayo

La corrupción también genera distorsiones en el sector público
al desviarse inversiones públicas a proyectos de capital en los que los
sobornos y mordidas son más abundantes. Los funcionarios pueden
incrementar la complejidad de los proyectos del sector público para
ocultar o allanar el camino para tales tratos, distorsionando de este
modo todavía más la inversión. La corrupción también hace descender el
cumplimiento de las regulaciones relacionadas con la construcción, el
medio ambiente u otras, reduce la calidad de los servicios e
infraestructura gubernamentales e incrementa las presiones
presupuestarias sobre el gobierno.
La corrupción facilita la destrucción medioambiental. Los países
corruptos pueden tener formalmente una legislación destinada a proteger
el ambiente, pero no puede ser ejecutada si los encargados de que se
cumpla son fácilmente sobornados. Lo mismo puede aplicarse para los
derechos sociales, la protección laboral, la sindicación y la prevención
del trabajo infantil. La violación de estos derechos legales permite a
los países corruptos ganar una ventaja económica ilegítima en los
mercados internacionales.

También han habido procesos judiciales contra (miembros de) distintos
tipos de organizaciones sin ánimo de lucro y ONGs, así como
organizaciones religiosas.

Corromper significa dañar, alterar, echar a
perder, viciar, pervertir. Cambiar el propósito originario
de una cosa, que deviene en algo negativamente considerado por
la moral
social. Siguiendo ese sentido la definición actual,
generalizada entre los expertos en la materia, la
corrupción es el uso de la posición y el poder
públicos para fines ilegítimos, inmorales, ilegales
o diferentes a lo formalmente establecido.

Creemos que para una más exacta
definición, se debe tener en cuenta, un sentido laxo de lo
que corresponde a lo público. Pues lo
público no necesariamente es un ministerio de gobierno de una
nación que debe decidir el destino de los fondos encomendados por su pueblo. Público también es la dirección de un gremio o un sindicato, o
el accionar de una empresa de
servicios
públicos, aunque sea una empresa
privada.

Es decir, todas aquellas funciones y
estructuras
que tienen que ver con lo público y la política.
Esto es, el bien común, la cosa pública , si no de “todos”, por lo menos de “los
muchos”.

Muchas veces hemos escuchado decir en nuestro
país Nicaragua, que el problema de nuestro país
es la corrupción y que ésta ha invadido al Estado.
De esta forma, sostienen, se ha conformado un Estado perverso,
manejado por una clase política también perversa
cuyo objetivo es
llenarse los bolsillos y estafar a la sociedad. Sostenemos
aquí en cambio, que
estas proposiciones nos dejan una imagen
distorsionada de la realidad. Una imagen en la que nuestra
sociedad, ingenua y pasiva, se encuentra condenada al fracaso
debido al mal manejo que de ella hacen un grupo “los
políticos” y a una institución “el
Estado”.

Tanto la descentralización política como la privatización pueden ser analizados
y evaluados como políticas dirigidas a hacer más eficiente la asignación global
de recursos y a ampliar las oportunidades de participación, objetivos que, junto
con la equidad, hacen parte del mandato de los actuales gobiernos democráticos.
La corrupción no sólo distorsiona en forma muy significativa los esfuerzos de la
democracia para lograr esos objetivos sino le resta legitimidad. De ahí la
importancia de contar con políticos que integren ambos tipos de procesos como
parte de reformas del Estado dirigidas no solamente a alcanzar los objetivos
mencionados sino también a aumentar la transparencia e inducir la participación
social en el control del gasto público.

La descentralización debe ser considerada como una reforma institucional, un
cambio en las “reglas del juego” entre el Estado y la sociedad civil para que
asignaciones que antes realizaba el gobierno central a través de procedimientos
predominantemente administrativos ahora sean efectuadas a través de
procedimientos políticos democráticos o de la competencia económica. Las
transferencias mismas no son lo más importante sino el proceso de cambio y
desarrollo institucional que permite inducir procesos de asignación socialmente
óptimos.

Sin duda la elaboración e implementación de políticas de descentralización
representa una oportunidad excepcional para modificar la institucionalidad
existente y desarrollar una nueva en el escenario local, que reduzca al máximo
las oportunidades y la disposición a hacer un uso ilegítimo de bienes
colectivos, o de la autoridad, en beneficio
privado.

Las posibilidades de gobernar “desde” (término
que se entenderá en cuanto cubra lo conceptual, político,
cultural y territorial) la corrupción es una puerta
abierta de par en par, la mayoría de instituciones que administran
el Estado viven de y en la corrupción, así que resulta
más sencillo acomodarse a los esquemas establecidos -¿existe
autoridad que lo desmienta?-, porque contrariarlos significaría
quedarse fuera del poder real, pero principalmente y la más
importante, sin la posibilidad concreta de enriquecerse y encontrar
seguridad personal y familiar. Y lo último si es tentador.

Los procesos de acumulación de riqueza basados en la corrupción
no son sino el reflejo de un deterioro conceptual de valores éticos
y morales y la preeminencia de conceptos como: “el que no roba,
es un pendejo”, o el “no importa que robe, con tal de que
haga obra”, principios que rigen las prácticas corruptas
y que han hecho de la corrupción un problema estructural.

La práctica generalizada de la corrupción en Nicaragua de los Gobiernos liberales anteriores
tiene como base la transgresión de los conceptos, se puede manifestar
que la mayoría de Instituciones públicas y privadas “saben” lo
que significa la corrupción, su categoría conceptual
ha sido asimilada por los actores, entienden ampliamente cada uno de
los conceptos; pero la propensión a actuar contrariando los
principios es una costumbre que ha marcado la vida de la República.

la corrupción nace aquella avaricia que se ve en los ciudadanos, aquel
apetito, no de verdadera gloria, sino de honores reprobables, del cual
derivan los odios, las enemistades, los sinsabores, las sectas, que a su
vez generan la aflicción de los buenos y la exaltación de los malvados,
porque los buenos, confiados en su inocencia, no andan, como los malos,
en busca de quienes les defiendan y honren, tanto que, indefensos y sin
honor, caen en la ruina.”

La corrupción política no se resuelve con llamamientos a la ética, y
empeñarse en hacerlo acaba perjudicando a la ética pública. Habrá que
pensar en algo mejor, ¿pero en qué? Lo primero es ser conscientes de que
siempre habrá políticos corruptos, del mismo modo en que hay
empresarios y empleados que también lo son, y funcionarios,
profesionales, periodistas, jueces, etc: gente que se enriquece
ilícitamente, que defrauda o que no hace lo que dice hacer. La
corrupción política es más grave, ciertamente, porque afecta a todos y
traiciona la confianza depositada en los gestores y representantes
públicos; llevada al extremo, destruye la democracia.

La corrupción política, fenómeno inherente a las sociedades democráticas
o totalitarias, ligada a los actores públicos o privados de carácter
internacional, nacional o local, enfrenta hoy el surgimiento de una
conciencia ciudadana cada vez más significativa en el orden moral,
jurídico, social o político. Súmase a este hecho las grandes
posibilidades tecnológicas del uso de medios de comunicación, el
intercambio de información global y las exigencias de la transparencia
en el quehacer público. Nunca antes un fenómeno tan universal e
inveterado, y a su vez casi invisible e invencible, como la corrupción
política, muestra su inmoral desnudez frente a la luz que emana de la
conciencia social de los pueblos del mundo.

* La corrupción es un problema social que afecta el ejercicio del
poder político, lo que merma y puede anular la capacidad de acción del
Estado para el logro y materialización de sus fines.

* Existen causas que generan la corrupción, las mismas que son endógenas (el individuo) y exógenas (la sociedad).

* La concepción económica del derecho considera a la corrupción como un efecto del alto costo de la legalidad.
* La lucha contra la corrupción demanda una gran tarea, que compromete el concurso de la sociedad civil organizada y del Estado.

Una idea concensuada es que cualquier cambio importante debe
ser con una visión de largo plazo, para ello es necesario conseguir los
acuerdos con los representantes de las diferentes tendencias, más allá
de la administración de un Presidente de la República, con el fin
de alcanzar el éxito en esta tarea.

Este ejemplo de corrupción nace el amor a los partidos y su potencia,
pues por avaricia y ambición los malos, y los buenos por necesidad, la
siguen; y lo más pernicioso es ver cómo, con un piadoso vocablo, hacen
que los móviles de esos partidos, sus intenciones y sus finalidades,
aparentan ser honestos.

La corrupción nace que las disposiciones y las leyes, no para la pública, sino para la propia utilidad se dictan.”

Tal corrupción nace que las guerras, las paces, las amistades, no para
gloria común, mas sí para satisfacción de unos pocos se deliberan.

En
una ciudad mancillada con tales desórdenes, las leyes, los estatutos,
los mandatos civiles, siempre fueron y serán ordenados, no ya según el
bien público, sino de acuerdo a la ambición de aquel partido que haya
permanecido superior a los demás.”

La corrupción distorsiona de raíz el papel de las instituciones
representativas, porque las usa como terreno de intercambio político
entre peticiones clientelistas y prestaciones de los gobernantes. La
corrupción está entre las causas que en mayor medida determinan el
subdesarrollo y la pobreza”,

Los Nicaraguense en su gran mayoría se ahorran el sacrificio de pensar,
prefieren repetir los eslóganes elaborados por estos gánsteres que
tienen como líderes sociales y políticos. Cualquiera que diga algo
verdadero será desacreditado y se le endilgará un mote ofensivo.

Hemos
prostituido tanto el lenguaje que las palabras no tienen valor. La
mentira se toma como verdad y la verdad como una falsedad y una ofensa.
Una palabra no significa lo mismo para un individuo que para otro.
Usamos palabras que no existen en el diccionario, y a otras le han
cambiado el significado.

La legalidad es una de las claves del desarrollo porque permite
establecer relaciones correctas entre sociedad, economía y política, y
predispone el marco de confianza en el que se inscribe la actividad
económica, y más aun planteó que la práctica y la cultura de la
corrupción deben ser sustituidas por lo practica y la cultura de la
legalidad.“Para combatir la corrupción es muy importante que las
responsabilidades de los hechos ilícitos salgan a la luz pública, y que
los culpables sean castigados con formas reparadoras de comportamiento
socialmente responsable, siendo la corrupción un conjunto de relaciones
de complicidad, oscurecimiento de las conciencias, extorsiones y
amenazas y pactos no escritos, se requiere de la educación y la
formación ética y moral de los ciudadanos”,

La ley es un pilar de las sociedades democráticas. Cuando las
cortes ceden ante la corrupción por avaricia o conveniencia política, la
balanza de la justicia se inclina y el ciudadano común se ve
perjudicado,” declaró Huguette Labelle, Presidenta de Transparency
International. “La corrupción judicial implica que la voz del inocente
no es escuchada, mientras que los culpables son libres de actuar con
impunidad.
La Corrupción concluye que una judicatura corrupta erosiona la
capacidad de la comunidad internacional para enjuiciar el delito
transnacional e inhibe el acceso a la justicia y el resarcimiento por
violaciones de derechos humanos. Además, mina el crecimiento económico
dañando la confianza de la comunidad de inversionistas y dificulta las
iniciativas de reducción de la pobreza.
Cuando las cortes son corruptas, resulta perjudicado el ciudadano común

Estado, sociedad civil y partidos políticos para implementarla como política de Estado.
que propiciemos un
pacto de lucha contra la corrupción, un pacto ético, entre gobierno,
estado y la sociedad civil y los partidos políticos, para que este tipo
de políticas sea una política de Estado, estratégica de largo aliento”, Finalmente, la
creación de la categoría “Buenas prácticas e innovación en materia de
lucha contra la corrupción”, en el marco del Premio a la Excelencia
Judicial.

ABEL REYES TELLEZ
PRESIDENTE NACIONAL
PARTIDO SOCIAL CRISTIANO
NICARAGUENSE .PSC.
TEOLOGO ESCRITOR CRISTIANO
EMAIL .PRESIDENTE.PSC@HOTMAIL.COM
505+2249 3460

20 02 2013
Leonel Ojeda

Ánimo Sr. Avendaño, no descanse en su propósito de LLEVAR A LOS TRIBUNALES DE JUSTICIA AL MAL PRETENDIDO PRESIDENCIABLE, si en su condición de Diputado hace eso y otras cosas, qué no hará con la banda presidencial tan anhelada puesta en su pecho?. Su caso se parece mucho al de la parábola bíblica de la Viuda que pedía al Juez hacer justicia de su adversario, con la diferencia que en este caso el gran Juez que tiene en su poder la facultad de despojar de la Inmunidad al mal pretendido presidenciable, a pesar de tener una aplastante aplanadora en la Asamblea Nacional, CON SU PROCEDER, SE ESTÁ VOLVIENDO EN CÓMPLICE Y COLABORADOR NECESARIO DE LOS MALES CAUSADOS A SU PERSONA POR EL MAL PRETENDIDO PRESIDENCIABLE.-

24 02 2013
jose lopez arroliga

mi opinion es que la limpieza se comienza por casa y de continuar asi aunque limpiaramos todo el pais de basura solo nos quedaria limpiar la asamblea y solo el honorable presidente de la asamblea tiene en sus mano hacerlo sino que tiene la obligacion de limpiar de basura su propia casa .

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